MARILÚ CRUZ MIMILA
No man
is an island
entire
of it self
Every
man is a part of the continent
Jonh
Donne
2:28
PERDIDA
(Mi nacimiento)
Una nuez…
Estrecho y
oscuro interior carente de oxígeno,
me asfixia la
opresión
la falta de
libertad me agobia y desespera
¿Estoy dentro?
¡Nacer es
preciso!
¿De nuevo?
¡Con más dolor!
Consciente soy
de romper la nuez
romper ese macizo
cascarón de costumbres,
añejas ataduras
me sujetan como una placenta extraña y amorfa.
Nacer…
Más no como la
primera vez,
un flujo
escarlata de conocimiento me empapa.
enrojecidas
gotas de intelecto tibio se desprenden de mí.
Al salir
despacio desde el centro mismo de mi mente
una lejana luz
distingo a través de mi conciencia obnubilada
que abierta
queda irremediablemente.
Ser. . . ¿Soy?
¡Libertad!
Alimentas mi alumbramiento
con la pasión
que mana de mi propia entraña ciega,
de mi
profundidad sombría.
Luz al final. .
. apenas.
La tradición
pesa, me cansa y detiene,
me arrastra y
cierra la salida.
La nuez. . .
debo romper la nuez.
Al final otro
intento,
otra dolorosa
contracción de parto falsificado
inevitable
detener el proceso de mi nacimiento apócrifo.
El hecho es
impostergable, el dolor, auténtico y real
el conocimiento,
como la claridad a las pupilas, hiere mi razón
con su lúcida
naturaleza.
La liberación
anestesia el poder de la sensatez
y la conciencia domestica
mis palabras de recién llegada
mi mente
emancipada del pasado aún no sabe caminar.
“Me
lancé sobre las ruinas con los brazos
abiertos
como para abrazarlas; las besé,
intenté
respirar el soplo divino que las
había
animado.”
Giacomo
Casanova
1:41
ABISMO
Somos cada lado
del puente,
unidos siempre
por el vacío.
Por ese abismo
de profundo y negro sopor que nos sumerge,
que nos inunda
con su lastimoso aliento.
Tu y yo uno a
cada orilla,
vetas de lumbre
situadas a los lados
tan callados que
nos parecemos.
Unidos ambos por
esa fosa dolorosa de oscuro precipicio
atados uno al
otro por lo profundo del barranco
que no es otra
cosa que la sed de lo perdido.
Uno a lo lejos,
pero al mismo tiempo también dos.
Engañosa
distancia que nos somete y nos semeja
que nos circunda
en un halo de misteriosa complicidad
que convierte
dos cuerpos en un solo punto, redondo y silente.
Nos quedamos en
la sombra, apostados a cada lado del sumidero
como guardianes
eternos de las horas idas
asidos siempre
por el deseo que nos domina
y que nos
mantiene sujetos a la costumbre
todavía.
“Gracias, noche
amantísima,
por la perfección de este momento.”
José María Álvarez
2:05
SECRETAMENTE EN EL SECRETO DE TODO*
Burlar el ojo que escudriña.
Al esconder el sentimiento a los curiosos
los sentidos vuelven a ser el fondo de todo.
Del tiempo renacido.
¡Ah, las horas que pasamos allí!
Sumergidos, lavados, hundidos en el agua
serena de lo que solo es nuestro.
Cerrar las ventanas de los otros, sumiendo el cerebro
en cada atardecer bajo capas densas de oro derretido.
Mantenernos así, calladamente en lo profundo de todo.
A las vistas retorcidos, escondidos.
Hablando apenas, antiquísimos y frágiles,
pero colmados de frescura.
La conciencia se nos esparció por el cuerpo invadiéndolo,
convirtiéndolo en una helada brasa mineral que lo ilumina
y lo mantiene encendido todo el tiempo
hasta terminar en el hueco negro, en el bostezo destrabado de
la noche vacía.
Secretamente en el secreto de todo
somos grumos de tinieblas embriagados de sombra
que vetean una enorme telaraña metálica.
Empapados de noche hacia el final de una hora
y el nacimiento de la luna, nos eternizamos
nos transformamos en ese momento
en el que el día ya no lo es y la noche tampoco.
En esa hora de la que nunca se intenta el regreso.
*Eliseo Diego Cuentos. (Historia del
desterrado)
Colección Calembé. Edita Fundación Municipal
de Cultura del Excmo. Ayuntamiento de Cádiz. algaida
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